miércoles, 28 de diciembre de 2016

Los agroecosistemas y plantaciones forestales se asemejan a ecosistemas en estado primario de desarrollo

Según Flores (2015), la sucesión ecológica es un proceso de cambio en los ecosistemas que tiene lugar en el tiempo, y que podemos observar tanto en el tiempo como en el espacio. Supone la sustitución de unas comunidades de especies por otras, de manera que con el transcurso del tiempo el ecosistema se va volviendo más complejo, aumentan los tipos de interacciones, y también suele aumentar la diversidad de organismos. Cuando algún fenómeno impulsa al ecosistema a cambiar en sentido contrario, simplificándose, se dice que se produce una regresión. Así, tenemos a la sucesión ecológica y a la regresión como procesos opuestos.
Hay dos tipos de sucesión, la sucesión primaria y la sucesión secundaria. La sucesión primaria es aquella que comienza en un hábitat totalmente inhóspito, sin suelo y sin banco de semillas. “Suelo” hace referencia a que haya al menos una cierta capa de tierra donde algunas plantas puedan desarrollar raíces, y que además haya materia orgánica acumulada, con una comunidad de organismos (bacterias, microfauna, etc.). El banco de semillas es el conjunto de semillas acumuladas en el suelo en estado latente.
Las plantaciones son agroecosistemas uniformes, que substituyen a los ecosistemas naturales y su biodiversidad, tanto a los bosques nativos (por ejemplo, en Chile, Brasil e Indonesia) como a la pradera (casos de Uruguay y Sudáfrica) (Movimiento mundial por los bosques tropicales 1999). Por tanto, se asemejan a una sucesión primaria, ya que al hacer una plantación el terreno inicialmente se encuentra inhóspito, la presencia de plantaciones comienza a modificar el hábitat, a crear suelo con materia orgánica y mayor profundidad, poco a poco, y se van creando condiciones que facilitan el asentamiento de nuevas especies que antes no podían establecerse. Así el ecosistema va cambiando, tanto en sus condiciones abióticas, como en el conjunto de especies y sus abundancias relativas.

La sustitución de los ecosistemas naturales por plantaciones forestales a gran escala provocan generalmente impactos ambientales y sociales negativos: disminución del rendimiento hídrico, modificación de la estructura y la  composición de los suelos, alteración de la abundancia y riqueza de la flora y la fauna, usurpación de los bosques ocupados por pueblos indígenas, expulsión de campesinos e indígenas de sus tierras y pérdida de sus medios de vida (Movimiento mundial por los bosques tropicales 1999).

Referencias:

Movimiento mundial por los bosques tropicales 1999. Plantaciones forestales: impactos y luchas. URL: http://wrm.org.uy/es/files/2013/04/Plantaciones_forestales_Impactos_y_luchas.pdf. (Accedido 25 diciembre, 2016).

Flores 2015. Biologia en teoría. Filosofia natural de la vida. Sucesión ecológica: La “evolución” de los ecosistemas. URL: https://bioteoria.wordpress.com/2015/10/18/ecological-succession/. (Accedido 28 diciembre, 2016).

domingo, 25 de diciembre de 2016

¿Por qué es más ecológico que un ser humano sea vegetariano en vez de omnívoro?

La  ganadería es un gran contaminante: genera más del 14 % de las emisiones de efecto invernadero causadas por el hombre, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), citada por  el periódico español, El país (2014).

Un mundo sostenible, según Stern, citado por el país (2014), tiene que ser necesariamente vegetariano, ya que el gasto de agua y la producción de gases de efecto invernadero para producir cárnicos es descomunal: ese 14 % equivale a multiplicar por 20 las emisiones de España en un año. Además, la comida para el ganado es ingente: un tercio del total de la que consume el planeta, según el estudio Beneficios climáticos de un cambio de dieta (Springer Science y Business Media, 2009), citado por El País (2014). “Si todo sigue como hasta ahora, las temperaturas subirán hasta cinco grados en un siglo y el sur de Europa será un desierto. Ser carnívoro se volverá inaceptable, como ahora lo es conducir ebrio”, aseveró en un discurso Stern.

Lo cierto es que los recursos para conseguir carne son tremendos en comparación con los vegetales. Un par de ejemplos: para producir un kilo de ternera se emiten 27 de dióxido de carbono equivalente (una medida que aúna el impacto de distintos gases de efecto invernadero), se necesitan 15.400 litros de agua y 100 kilos de su proteína requieren 6.000 metros cuadrados de terreno. El mismo peso en lentejas requiere menos de un kilo de CO2, 5.854 litros de agua y 2.500 metros cuadrados de tierra.

“En Occidente comemos carne a un precio asequible porque hay sitios en el mundo donde ni la prueban, es así de cruel. Si en China o la India empiezan a hacerlo, algo lógico dado que su nivel de vida va subiendo, el impacto ambiental será muy fuerte. De hecho, estos países ya están comprando extensiones brutales de tierra en África para alimentar a su ganado”, asume José Miguel Mulet, citado por El País (2014).

Referencias:
El País 2014. Desarrollo sostenible. ¿Y si dejáramos de comer carne? URL: http://elpais.com/elpais/2014/11/26/buenavida/1417006731_060496.html. (Accedido 25 diciembre, 2016).

Definiciones

·         Estado Clímax alternativo de la sucesión: Según Alberto (2006), las sucesiones primarias son aquellas donde el proceso de sucesión se desarrolla desde una zona desnuda hasta alcanzar el clímax. Las secundarias pueden partir de una etapa cualquiera de la serie, causada por una perturbación (incendio, inundación, etc), transcurrido un tiempo retornan a la serie primaria completa, o pueden originarse en paisajes gestado por el hombre (cultivos, potreros, áreas desforestadas, etc) que una vez abandonados tienden a regenerarse lentamente hacia una sucesión primaria, pero si el impacto es negativo y duradero derivarán en un disclímax. Tiene un sentido contrario al clímax, tienden al desequilibrio, es un proceso hacia etapas inmaduras del ecosistema. Las causas se originan en el ambiente, y en la acción del hombre. No se trata de una sucesión ecológica invertida, es una regresión forzosa del ecosistema por la destrucción de alguna etapa de la serie (incendio forestal sin regeneramiento, podría derivar en la desertización).

·         Respiración ecosistémica: el conjunto de todas las respiraciones individuales de los organismos en un ecosistema. (Gobierno de España 2012).

·         Evapotranspiración potencial (ETP): Se denomina evapotranspiración al conjunto de pérdidas físicas (evaporación) y bilógicas (transpiración de las plantas) del suelo en vapor de agua. Se expresa en mm. por unidad de tiempo. Depende de factores de orden climático (radiación , humedad del aire, viento), relativos a las plantas (cubierta vegetal) y edáficos (tipo de suelo, estado de humedad del suelo), por lo que es conveniente distinguir entre evapotranspiración efectiva (cantidad de agua realmente transferida a la atmósfera) y evapotranspiración potencial (cantidad máxima, teórica, de agua que puede evaporarse desde un suelo completamente cubierto de vegetación y constantemente abastecido de agua). En relación con las precipitaciones recogidas, la ETP se usa como un indicador de humedad o aridez climática. (Gobierno de España S.F.)


Referencias:
Alberto, Juan A.  2006. En busca del equilibrio perdido: Ambiente o Sociedad… Ambiente y Sociedad. El caso del área metropolitana Gran Resistencia. Universidad nacional del Nordeste. URL: http://www.unne.edu.ar/unnevieja/Web/cyt/cyt2006/02-Humanidades/2006-H-013.pdf. (Accedido 25 diciembre, 2016).

Gobierno de España 2012. Los ecosistemas acuáticos producirán más CO2 que los terrestres por el aumento de las temperaturas. Ministerio de Economía y competitividad. URL: http://www.dicat.csic.es/dicat/es/2012/97-los-ecosistemas-acuaticos-produciran-mas-co2-que-los-terrestres-por-el-aumento-de-las-temperaturas. (Accedido 25 diciembre, 2016).

Gobierno de España S.F. Evapotranspiración potencial (ETP) media anual. Ministerio de fomento. URL: https://www.ign.es/espmap/mapas_clima_bach/pdf/Clima_Mapa_08texto_corregido.pdf. (Accedido 25 diciembre, 2016).

viernes, 2 de diciembre de 2016

Harmonia axyridis, una amenaza para la biodiversidad

La chinita arlequín (Harmonia axyridis), según el catálogo español de especies exóticas invasoras (2013), forma parte de la base de datos de especies invasoras del Grupo de especialistas en especies invasoras de la UICN. Se ha utilizado ampliamente en todo el mundo para el control biológico de las diferentes especies de áfidos, concretamente para el control de plagas de pulgones en invernaderos, huertos y jardines. Tienen grandes capacidades de dispersión, lo que le permite colonizar rápidamente nuevas ubicaciones. Vuela rápidamente entre las plantas hospedadoras y durante los periodos de reproducción migra a través de distancias largas. Su amplia distribución latitudinal y actitudinal en Asia, indica su amplia adaptabilidad ecológica, desde climas fríos a cálidos. Se localiza en zonas agrícolas, bosques naturales, zonas urbanas, es decir, está ampliamente distribuída. Coloniza una amplia gama de hábitats. Se alimenta principalmente de insectos himenópteros como áfidos y cochinillas, también de estados inmaduros de otros coleópteros y lepidópteros y de material vegetal, como frutas y polen.


En síntesis, se trata de una especie con una alta capacidad de dispersión, que compite y depreda sobre especies autóctonas de coccinélidos ("chinitas"). Tiene efectos drásticos sobre la agricultura, principalmente en las explotaciones hortícolas y viñedos, convirtiéndose en algunas zonas, en plaga. Su presencia puede producir problemas alérgicos a la población humana. El control de sus poblaciones es difícl y con severas implicaciones ambientales. Desplaza poblaciones de coccinélidos nativos, de los que se alimenta, reduciendo sus poblaciones paulatinamente.

Fuente: Laboratorio de ecología de ambientes fragmentados de FAVET UCHILE, 2016.

Referencias:
Catálogo español de especies exóticas invasoras 2013. Harmonya axyridis. URL: http://www.mapama.gob.es/es/biodiversidad/temas/conservacion-de-especies/harmonia_axyridis_2013_tcm7-307033.pdf. (Accedido 02 diciembre, 2016).


Laboratorio de ecología de ambientes fragmentados (LEAF) de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile. Chinita arlequín Harmonia axyridis en Chile. URL: http://www.chinita-arlequin.uchile.cl/reconocimiento. (Accedido 02 diciembre, 2016).

jueves, 1 de diciembre de 2016

Agallas del Colliguay

En 1926 el Dr. Carlos E. Porter, catedrático de Zoología general y entomología aplicada del instituto Agronómico de Chile, en los arrededores de Valparaíso vió agallas producidas por un insecto en matas de Colliguay (Colliguaja odorifera). Al abrir algunas agallas encontro despojos de pequeños himenópteros y así mismo de una larva indeterminable por su mal estado. Determinó, con ayuda de un artículo publicado en la Revista Chilena de Historia Natural (1925, pp 49-51), que el microhimenóptero encontrado en Valparaíso se trataba del Eulophidoe tetrastichus colliguayae, que es el parásito de otro insecto habitante y productor de las agallas. El profesor C.S Reed (en Rev. Ch. Hist. Na. 1924, pp 206-207), dijo que la otra larva que vió en las agallas debe ser de un Lepidóptero. Paul Herbs (en Rev. Ch. Hist. Nat. 1925, p. 363) piensa que las agallas de colliguay son fromadas por dípteros y que el himenóptero sería parásito de esos dípteros.

La interacción entre el díptero o Lepidóptero que podruce la agalla y el Colliguay, se trata de parasitismo, pues la agalla produce células que para la planta son como células cancerígenas.
Fuente: Porter 1926.
Referencias:


Porter 1926. Sobre un insecto de las agallas del Colliguay. URL: http://rchn.biologiachile.cl/pdfs/1926/1/Porter_1926d.pdf. (Accedido 01 de diciembre, 2016)